miércoles, 1 de mayo de 2013

Máscara mortuoria


Jorge Armando Ortega del Campo
Ejercicio de escultura con pasta de azúcar 1, 2012
Pasta de azúcar, unicel y alambre.
30 x 40 x 16 cm

Pues este es el primer ejercicio que hago de escultura en pasta de azúcar. Lo hice como especie de prototipo para el proyecto que quería meter al Fonca (no pude porque soy un animal y me hice bolas con las fechas). De lo perdido lo encontrado, tengo más tiempo para practicar y agarrarle el modo a la técnica que me está gustando bastante. Como comercial, aprendí a hacer la pasta de azúcar, pastillaje, fondant y glasseado en el Instituto del Arte Mexicano del Azúcar, con fórmulas de Marithé de Alvarado. Ya con calmita luego le entro a las otras técnicas que también tienen mucho potencial.

domingo, 17 de febrero de 2013

Our lady of sorrows

Our lady of sorrows es la primera de las piezas que he elaborado con pasta de azúcar y glaseado; con fórmulas y técnicas perfeccionadas por Marithé de Alvarado y aprendidas en el Instituto Mexicano del Arte del Azúcar.


Jorge Armando Ortega del Campo
Objeto inútil No. 9: Our lady of sorrows, 2013
Machetes cubiertos de pasta de azucar y glaseado
5 x 59.5 x 3 cm c/u


Esta pieza es la novena de la serie Objetos inútiles, que realicé en principio con el apoyo del Pecda (el equivalente estatal de las becas del Fonca en los estados) del Instituto de Cultura del Estado de Durango cuando resulté beneficiado por dicho programa en 2008. La serie Objetos inútiles tenía por objetivo, a grandes razgos, despojar de su función a objetos utilitarios por medio de la decoración o la intervención con elementos asociados a la iconografía cristiana. 

Our lady of sorrows (Nuestra señora de dolores), es la advocación mariana que se representa como una virgen con siete espadas apuntando a su corazón (o atravesándolo). Cada espada representa algún episodio doloroso de la vida de la virgen María, desde la profecía de Simeón cuando presentó a Jesús en el tempo hasta la sepultura del mismo. La idea de la pieza es sintetizar la iconografía tradicional con el elemento más característico de la misma.

Tarde algo así como un mes en elaborar la pieza, por ser la primera vez que utilizo pasta de azúcar tardé un rato en encontrarle el modo. He de decir que es un material muy interesante. Tiene una consistencia y resistencia parecida a la cerámica, sin embargo durante el secado cede un poco al peso, como la plastilina epóxica. Las letras están hechas con glaseado y fueron aplicadas con duya o cartucho de celofán dulce. El plan original era hacer una caligrafía mucho más ornamental, pero ni soy calígrafo ni tengo mucha práctica con la decoración, y es que tiene su chiste. Con más experiencia seguro podré hacer cosas más elaboradas. De cualquier modo estoy muy satisfecho con el resultado de este primer ejercicio. Espero pronto poder mostrar más piezas.



martes, 29 de enero de 2013

Las chicas de la Tierra son fáciles


Las chicas de la Tierra son fáciles es el nombre de la primera serie que realicé cuando hacia mis pininos en esto de ser artisto cuando era un estudiante en Cuévano  Ésta serie estuvo conformada primero por ocho piezas, de las cuales cuatro se presentaron en la exposición Invasión extraterrestre en la salas Polivalente y Hermenegildo Bustos de la Universidad de Guanajuato, por ahí del 2002, en una expo curada por Leonardo Ramírez, que también curó la exposición Link-X que se presentó en las mismas fechas, pero en el Museo de la Ciudad de Querétaro. Leonardo Ramírez a su vez, escribió el texto de la última vez que está serie fue presentada en 2007.



Ayesha 
(Los versos satánicos de Salman Rushdie)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002




Las chicas de la Tierra son fáciles es una serie que representa y reinterpreta iconográficamente a personajes femeninos de la literatura, como Lisistrata, Dulcinea, Mina Murray o Alia Atreides. 

En 2002, que fue cuando empecé a trabajar en este proyecto, la lona impresa era un soporte súper sensa... novedosísimo y así. En estos momentos ni en defensa propia se me ocurriría trabajar con ese material, pero la verdad es que quedaron muy muy bien en ese soporte. Por cierto, los dibujos se hicieron primero en papel, luego los entinte, luego fueron escaneados, luego vectorizados y coloreados. Algunos de los bocetos pueden verse en este link. 

Mientras estuve en Barcelona por casualidad pasé a la inauguración de una exposición en la Galería Punt Multimèdia, y le mostré las piezas a la directora, cuyo nombre desafortunadamente olvidé. Meses después me invitó a exponer la serie (que tendría que agrandar a 15 piezas), en su galería, convirtiéndose así en mi primera y única exposición individual fuera de México. Por último tuve ocasión de exponer la serie en mi aldea, Durango, en el salón de proyectos del Instituto Municipal del Arte y la Cultura (IMAC), pero está vez la muestra tuvo por nombre Not from Venus nor from Mars... (donado por David Tremary), donde tuve el gusto de compartir la inauguración con Miguel Ángel García Padilla, que llevaba su serie Viento a exponer a la Sala Guillermo Bravo del mismo instituto y así es cómo salió el asunto...




Santa Alía del cuchillo, cazadora de mil millones de mundos
(Hijos de Dune de Frank Herbert)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002


Space glitter / Diamantina espacial


“Es difícil imaginar o subestimar el precio que muchas de estas mujeres pagaron en el transcurso de la soledad, la duda de sí mismas, el ridículo y el insulto. A menudo se les acusó de flagrante violación de las leyes, escritas y no, de Dios y los hombres. Muchas fueron privadas de su libertad por sus creencias y actividades. Fueron vistas como transgresoras del orden natural, el modo en el que “todos” creían que las cosas debían ser. Ellas perseveraron contra todas las dificultades que se suponían infranqueables y triunfaron.”
Phyllis J. Read y Bernard L. Witlieb 
  The Book of Women's Firsts

Recién me devolvieron algunas películas que presté hace unos de días y observo con sorpresa que las 5 cajas que tengo en las manos cuentan historias de mujeres; art star, niña de concurso, aristócrata adolescente, vendedora de tienda departamental y la hija de un par de junkies sin remedio.

El común denominador de esas películas es que abordan en sus historias a mujeres extraordinariamente desenfadadas, extrovertidas, exóticas y  divertidas –¡guau! como las mujeres de Maitena, la caricaturista argentina- que al mismo tiempo son ejemplos de soluciones narrativas inteligentes que encontraron los guionistas y directores.

Pues justamente me llamó la atención, que en una pila de información digital amontonada al azar, me pudiera percatar de cuan complejo y fascinante puede ser el mundo femenino. En tan sólo la palma de mi mano y gracias a un atisbo, encontré  varias alusiones a los personajes que Jorge Ortega del Campo examina con una acuciosa y obsesiva compulsión y es justamente ahí donde creo que radica su interés en la decodificación minuciosa de ciertos personajes femeninos arquetípicos que le han atraído por sus peculiaridades personales, históricas o histéricas y las posibilidades de representación que estos tienen  y con los que encuentra afinidades estéticas o emocionales.

Las piezas de la exposición Not from Venus nor from Mars... de Jorge Ortega del Campo recorren un amplio espectro de referencias y soluciones visuales (muy cercanas a la ilustración), por ejemplo, su uso indiscriminado del manga es, desde mi perspectiva, su más grande acierto formal, ya que otorga a éstos personajes un grado mítico y lejano, hecho que favorece el que puedan portar vaporosos vestidos, listones  voladores, brillos inverosímiles (o mas bien verosímiles para la película de Barbarella) y colocarlos al nivel de súper heroinas de la aldea global.

Si analizamos las figuras con detenimiento, podemos encontrar detalles maravillosos envueltos en una serie de trazos y colores sofisticados, elementos que nos dan la facilidad de reconocer o recordar a ciertos personajes por una u otra razón. Las minucias a las que me refiero son evidentes, pero quedan perfectamente integradas en la composición final de las obras de Jorge Ortega del Campo, de tal forma aparecen como conejos flotantes, manos ensangrentadas, miles de mariposas en un manto largo de color dorado.

Sus piezas desarrollan una particular movilidad estructural que les permite cambiar de dimensiones con toda naturalidad, de tal modo que no resultaría extraño que encontrásemos estas obras como figuras espectaculares de grandes dimensiones o en pequeños recuadros de papel impreso en inyección de tinta.

En la exposición Just Play algunas de sus figuras estaban colocadas en el ala lounge de una discoteca, ahí, en ese espacio, en el techo, una esfera discotequera, arrojaba fragmentos de luz y colocaba a estos personajes en una  pequeña  atmósfera de ciencia ficción, lugar en donde las imágenes deambulaban sin ningún problema, en un espacio artificial, ad-hoc para estas simulaciones electrónicas.

Tengo la impresión de que estas piezas han encontrado cabida en otros espacios, donde seguramente circularán y  su influencia será definitiva. No me extrañaría encontrar a estas mujeres convertidas en muñecas de acción, en figuras animadas o involucrándose en otro tipo de formatos, como un cómic, asunto que me parece muy antojable.

La cercanía que tengo con sus obras me hace pensar en que podría estar viendo tranquilamente un montón de personajes más, en mi computadora o en la televisión, recordando mis tardes adolescentes de historietas y harta coca-cola con cheetos.


Leonardo Ramírez
Cd. de México
Febrero de 2007










Alicia
(Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002





Dulcinea del Toboso 
(El ingenioso hidalgo Don Quixote de la Mancha de Miguel de Cervantes Saavedra)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004





Leonora
(El cuervo de Edgar Allan Poe)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004







Justine 
(Justine o los infortunios de la virtud de Donatien-Alphonse-François de Sade)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004







Lilit 
(Yalqut Reubeni recopilación de R. Reuben Ben Hoshke Cohen)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004






Lisístrata
(Lisístrata de Aristófanes )
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002




La reina Mab 
(Romeo y Julieta de William Shakespeare)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002






Lady Macbeth
(Macbeth de William Shakespeare)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002





Lucía, la Maga 
(Rayuela de Julio Cortázar)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004






Margarita 
(Fausto de Johann Wolfgang von Goethe)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2002







Pentesilea 
(Posthomérica de Quinto de Esmirna)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004




Mina Murray
(Drácula de Bram Stoker)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100 x 200 cm / 2004





Úrsula Iguarán
(Cien años de soledad de Gabriel García Márquez)
Inyección de tinta sobre lona plástica / 100x200 cm / 2004



Y así se veía la expo...







Y así me veía yo hace 30 kilos



En la foto mi muy querido amiguo Miguel García y la guapísima Cristina Sandor




Y aquí la que era directora del IMAC en aquel entonces, Corín Martínez, con Mauricio Vázquez (los dos al centro), ambos muy queridos por su servidor.

viernes, 4 de enero de 2013

Nuestra señora de la lágrima


Nuestra señora de la lágrima es la tercera pieza que integra un tríptico que se llama The Witching Hour -supongo que habrá que intitular a las tres muchachonas en inglés también-.

Junto con la Nuestra señora de la luz y Nuestra señora desatadora de nudos conforman la primerisimísima pieza que terminé en este año nuevecito y, espero, mejorado.

Si mi noviecito me da permiso la pondremos en la sala del hogar cuando me mude a vivir con el en un par de meses.

Por cierto, todas están hechas con Corel Draw, ese paquete al que tanto diseñador ve chiquito y orejón (que Dios te guarde Dr. Alderete). A mi me funciona super sensa.

No se a ustedes pero, con perdón, a mi me parecen chulas de bonitas.




 Lo que sigue son las esculturas de pasta de azúcar...


Siéntase libre de dejar un comentario y más aun si es buena ondita. Tenga un maravilloso 2013 y cómase una rosca.